Código Karma

Nada ocurre sin una causa,

todo lo que se vive hoy

son consecuencias de acciones pasadas.

Cada ser humano es un alma. Nuestra alma es como un viajero del tiempo que busca tener experiencias nuevas, realizar acciones reparadoras, y desarrollar su potencial. Esto se traduce en que nacemos en una familia acorde a lo que debemos lograr y además, nos exigirá recurrir a nuestro potencial, así surgen las condiciones familiares y físicas con las que nacemos. Podríamos decir que cada alma nace con un karma  y una misión, esto significa desarrollar habilidades y restaurar algo en el clan familiar, ya que por afinidad vibratoria nacemos en esa familia y no en otra.

Como ya se dijo, cada persona es un alma, cada alma tiene su reino propio de manifestación y expresión que reconocemos como cuerpo físico. Nuestro cuerpo es la tierra fértil donde se manifiestan nuestras decisiones y acciones. Tal vez podríamos preguntarnos si sería posible evitar el karma personal o familiar ya que tenemos libre albedrio.

Todos sabemos que cada persona tiene libre albedrio, es decir, cada uno puede elegir la forma en que enfrenta su karma, pero es imposible evitar el cumplimiento del karma. Si revisamos nuestra vida actual veremos que hay una historia detrás, hay un camino de experiencias positivas o no positivas que hemos seguido para estar en donde estamos, haciendo lo que hacemos. Se podría pensar que estamos condenados a vivir un destino que generalmente creemos no merecer.  Muchas veces se entiende que hablar del destino es hablar de castigo o de mala suerte. La buena noticia es que podemos accionar conscientemente nuestro potencial y resolver, de alguna forma, aquello que nuestra alma ha venido a restaurar, a esto le llamamos Jyotish Karma o Código Karma, en otras palabras, Código Karma nos permite conocernos y porque no, tomar nuestro destino en nuestras manos.

COMO PEZ EN EL AGUA    

Vivimos en un gran océano de conciencia que contiene todo lo necesario para desarrollarnos y ser felices. Puede resultar algo difícil de explicar esto, ya que sería como explicarle a un pez como es el océano, el pez simplemente vive ahí y no se cuestiona. Los seres humanos tenemos conciencia de estar vivos, pero la gran mayoría no tiene conciencia del océano vibrante pletórico de vida en el cual existe.  

Todo parece indicar que la vida está llena de restricciones para muchos y privilegios para pocos, afortunadamente estamos iniciando una Nueva Era, con nuevas condiciones de consciencia y, con un ser humano que en el último tiempo ha descubierto que existimos en un universo vibrante de potencialidad infinita.  

El ser humano moderno con su desarrollado intelecto ha rechazado todo aquello que no cumpla con los requisitos de las ciencias oficiales, desconociendo el proceso evolutivo de la humanidad, el logro de las almas y, además, desconociendo la realidad espiritual, que frecuentemente confunde como dogmas religiosos.

Una Nueva Era trae nuevos descubrimientos, nuevas formas de convivencia humana, nuevos anhelos y metas, no obstante, las leyes universales siguen siendo las mismas, eso incluye, entre otras, la ley del karma.

Nos sentimos afortunados de haber tenido acceso a conocer lo que hemos llamado Código karma, una forma de descubrir lo que debemos corregir para lograr los anhelos de nuestra alma y sobre todo para estar en resonancia con la Conciencia Universal que nos rige, ya que estamos ciertos que quienes puedan descubrir su karma podrán navegar por el océano de vida como pez en el agua.  

¡Bienvenida Nueva Era!

¡Bienvenido Nuevo Sol!